Errantes
Nómadas, viajeros. Con el alma y los pies en ninguna y todas partes, pasando de puntillas por las convenciones, sin más asiento que el calor de una familia, la identidad de un pueblo, la llamada de la sangre… Vidas ambulantes, hoy aquí y mañana quién sabe, que sus mujeres aceptan como uno de tantos desafíos. Hay mucha fuerza interior en la mujer errante, esa pose genuina y descarada que hoy reconocemos en la gitana rumana, una autenticidad inspiradora que es el punto de partida formal de la colección 2014 de Pilar Vera.
La nueva flamenca de Pilar Vera habla de mujeres de carácter, determinadas, arrogantes a veces, pícaras, que beben de la estética de las gitanas centroeuropeas de antaño y que de algún modo avistamos hoy en la balcánica trashumante, en su falda larga y colorida, en su pañuelo anudado a la cabeza. Es una colección teñida de romanticismo y tradición en la que la mezcla inesperada de tejidos, prints florales y lunares recrea la bohemia romaní. Algodones, sedas, popelinas y batistas juegan a la mezcla con estampados diversos, consiguiendo un armónico resultado.
Los volantes se disponen en cascadas desde la cadera, jugando a las capas con el volante canastero para un resultado envolvente, jugando con los largos, fruncidos y plisados en busca de disposiciones novedosas y con mucho movimiento. Las mangas, mejor largas y con detalles fruncidos en hombro; los escotes embellecidos con siluetas corazón. Y los mantoncillos de lunares y largos flecos y los grandes pendientes dorados, el guiño retro y provocativo. Salud y Libertad ¡Sastipen talí!