Empresario de éxito en Sevilla. Ciudad a la que quiere y ama, la que le ha dado el privilegio de ser su próximo Rey Baltasar en la Cabalgata. El actual hermano mayor del Rocío del Salvador combina su devoción a la Reina de las Marismas con su día a día en sus facetas de ganadero, promotor inmobiliario y hotelero.
– ¿Qué ha significado para usted ser la persona que encarne el próximo Rey Baltasar?
– Para cualquier sevillano, la cabalgata es uno de los momentos más importantes y emotivos que hay en todo el año. La cabalgata, aunque es un concepto universal, es sevillana; es la nuestra. Considero que es de las más importantes del país y la que más se vive en la calle. Es un orgullo y un honor ser Rey Baltasar. No es una cosa que me haya venido, es una cosa que he querido hacer siempre. Nací en la calle Asunción y no ha habido año que haya dejado de ver la cabalgata. Mi tío y padrino Gabriel también fue Rey mago. De alguna forma sigo bebiendo de su estela. Ser rey mago es de las cosas más bonitas que le puede ocurrir a un sevillano.
– ¿Cómo espera vivir ese día?
– Muchas veces lo pienso. Sueño y me veo montado en la carroza lleno de niños. La verdad es que es una emoción desbordante y la verdad que también es una preocupación porque yo allí no seré Gabriel Rojas, yo seré Baltasar y Baltasar no puede fallar. Sé que la cabalgata, además de ilusionante, es muy importante para los sevillanos y el ateneo. Tengo que transmitir ilusión a los niños y que crean lo que realmente somos.
– Para que la gente conozca mejor al nuevo rey: ¿Cómo es Grabiel Rojas en su faceta personal?
– Soy una persona seria y comprometida con los proyectos que tengo entre manos. Después, familiar, devoto, rociero y muy sevillano. Sevilla la llevó en la sangre.
– En el plano profesional, ¿cómo va todo?
– Afortunadamente, gracias a Dios y a la Virgen del Rocío, después de esta crisis tan impresionante que hemos sufrido y principalmente a los que nos dedicamos al sector inmobiliario, hemos sobrevivido y tenemos proyectos muy ilusionantes en todas las áreas que tenemos: tanto agropecuaria, inmobiliaria, como hotelera.
– Un deseo para la ciudad el próximo cinco de enero.
– Me gustaría que todos le fuésemos un impulso para que nuestra ciudad tuviera más trabajo, más educación, más servicios y que realmente nuestra ciudad pueda estar donde yo creo que se merece. Como empresario, es un compromiso que tengo. Trabajar por Sevilla.
Texto y fotos: Javier Comas