Diez discos y diez razones para seguir cantando. Marta Quintero se sincera por estas callejuelas de Escaparate entre las hermosas estancias del hotel Palacio de Villapanés. Acaba de presentar “Inevitable”, el nuevo single de su disco “Décima realidad”, donde comenta que ha alcanzado su madurez artística. Sus vivencias, sus momentos y algunos de los momentos que han marcado la carrera en esta entrevista sincera.
¿Cómo es Marta Quintero?
Si tuviera que decirlo en una palabra, diría que feliz.
¿Por qué “Décima realidad”?
Porque es mi décimo disco. Le di muchas vueltas al título pero llegue a la conclusión que tener diez discos en el mercado es bastante complicado. Ya estaba hecho el disco y ya estaba aquí. Por eso ese nombre.
¿Qué diferencia hay entre la Marta Quintero del primer disco y del último?
En la personalidad, he cambiado por la edad. Soy una persona más madura y ya sabes lo que realmente haces. Cuando grabé mi primer disco no tenía ni idea de donde estaba entrando. Con 15 años me metí en estudio. Por lo demás soy la misma en todo. Ahora tengo las ideas más claras. Antes, pocas veces me metía en la producción, ahora tengo mi propia compañía discográfica que me permite adentrar me mucho más en el disco.
¿Es más difícil ser artista ahora que antes?
Mucho más. Antes había artistas de primer, segundo o tercer nivel. Ahora con los nuevos formatos televisivos salen artistas todos los días y es mucho más difícil mantenerse. Yo me siento afortunada, la verdad.
¿Y por qué es “Inevitable”?
El nombre del tema lo eligió el autor. En el momento que lo escuché, sentí algo distinto. Me recordó a “Mi principio y mi fin”, que tiene esa connotación un poquito más flamenca pero que con los arreglos actuales pensé: “Este va a ser el single”.
Si habláramos de un referente artístico para María, ¿sería?
Como empecé con la copla, sin duda Marifé de Triana. Tanto como artista, como persona. A mí me dio muchos consejos cuando tenía diez años. Me dijo que “la artista debe serlo encima del escenario y, cuando te bajes de él, tú como persona”. Ese consejo lo sigo y es lo que me hace estar feliz.
¿Qué hay de Sevilla en tu música?
En mis canciones realmente poco porque no las compongo yo. Pero Sevilla es mi forma de ver y de sentir. Me siento super orgullosa de ser sevillana, andaluza y española. He nacido donde tenía que nacer. Siempre he llevado a esta ciudad por bandera. Aunque mis temas le cantan más al amor y al desamor.
Hablando de ello, ¿te sientes más a gusto cantándole al amor o al desamor?
Al amor es maravilloso cantarle. En este disco hay mucha declaración de amor, pero también está el desamor. Pero, cuando le cantas al desamor, lo sientes distinto. Según la vivencia que uno tenga, puede llevarse el tema para un lado u otro. Pero, como ahí tienes esa tristeza, quizás sea más profundo. Aunque prefiero cantarle al amor.
¿Cuál es la canción que ha marcado la carrera de Marta Quintero?
“Encerrada en libertad”. Fue un tema que me regaló un antes y un después en mi carrera. Estaba del disco “No te olvido”. En ese disco está “Mi principio y mi fin”.
Que sí que fue un nuevo principio…
Ha significado muchísimo. Se hizo para cerrar un disco y ha llegado a tantísima gente… Sin tener un videoclip, tiene más de cinco millones de visitas en Youtube. A partir de ahí, sentí que se conocía más a Marta Quintero. Me ha dado muchísimas alegrías y, después de muchos años, me sigue dando. Todos los días me sorprendo con historias que me llegan de los que la escuchan. Desde gente que se la ha tatuado, hasta gente a la que ha ayudado a salir adelante.
¿Se puede contar?
Sí. Me escribió una chica hace diez meses. El tema era especial para una mamá y su hijo. Era la canción de sus vidas. La madre enferma y entra directamente en coma. Se la llevan al hospital porque él no quería tener el recuerdo de que su madre se marchara de este mundo en la cama de su casa. Estando allí, la madre llevaba diez días sin responder a nada. Entonces, a él le da por coger el móvil, se acerca a ella y le pone la canción. Entonces, esa madre despierta por unos segundos, abre un poco los ojos y le dice a su hijo: “¡Ay, qué me gusta!”. Le coge por el cuello, le da un abrazo, le dice “te amo” y se despide de él cuando daba por hecho que no lo iba a hacer ya. Su familia me ha dado muchísimas veces las gracias. Realmente dices: “¿Hasta dónde puede llegar la música?”. Eso es lo que me hace seguir en este mundo.
Como si fuera un título de una de tus canciones, ¿qué le pides a “Lo inesperado”?
Le pido muchos éxitos, que este disco me haga dar un paso en firme y adelante. Porque, esto es una carrera de fondo y nadie te regala nada. Cada paso que des tienes que trabajarlo mucho. En mi vida personal, seguir como hasta ahora; junto a mi marido y mis hijas.
Texto: Javier Comas
Fotos: Aníbal Gonzalez