Desde que en el año 2013 Mercedes Eirín fundara su estudio, Universo Eirín, en Sevilla, la diseñadora e interiorista no ha dejado de crear y desarrollar productos, y espacios de diseño contemporáneo. Su participación en la Milano Design Week en el año 2012, supuso un punto de inflexión para su carrera. Momento, a partir del cual dirige Universo Eirín en la capital de Andalucía; un espacio en el que no ha dejado de desarrollar mobiliario y productos de diseño en ediciones limitadas. Hoteles, planes urbanísticos o piezas artísticas, tanto a nivel nacional como internacional, han supuesto la gran revelación de Mercedes Eirín, por su manera de innovar, por su capacidad de sorprender y por su forma de llegar a la emoción.La versatilidad de su obra y su dos décadas de experiencia en el sector del interiorismo y la decoración la han llevado a exponer en el Thyssen-Bornemisza de Madrid. Grandes coleccionistas de arte, cuentan en sus colecciones con algunas de las piezas realizadas por la artista sevillana. Mercedes Eirín ha sido premiada con la Estrella de Oro por su compromiso con la excelencia, la Medalla de Oro Nacional de la Imagen (AEPI), la Medalla de Oro al Mérito en el trabajo otorgada por la Asociación Europea de Economía y Competitividad y ganadora de la iniciativa europea WORTH Project. Estos reconocimientos a su trayectoria profesional y el trabajo que realiza reflejan valores que ayudan a conseguir una sociedad mejor. Así trabaja esta diseñadora de prestigio internacional desde Sevilla.
¿En qué proyectos anda trabajando ahora?
Hemos estado en Holanda y Milán. En Holanda está siendo ahora de manera digital. Fue a través de un concurso que gané de la Unión Europea donde presento un revestimiento vivo. Una instalación dinámica. Estamos también con un proyecto lumínico con Ximénez y otro con mobiliario urbano basado en fractales de la naturaleza, en el cual mezclo energía solar, espacios para plantas, fuentes… este proyecto es en colaboración con Stone&Equipment, en Miami. También estamos con varias viviendas, a través de una marca nueva que hemos sacado. Queremos realzar que hemos empezado a colaborar por nuestra espontaneidad y cercanía con el arquitecto Honorio Aguilar, y grandes sorpresas esperan en este sentido.Hemos sacado una marca nueva que se llama Taracea para llegar a todos los públicos.
Viendo toda la diversidad de trabajos, ¿cuál es la frase que mejor define a su empresa?
Diseño artístico y experimental, para objetos y espacios. Creamos desde botellas, bolsas, muebles, esculturas, instalaciones. Realizando locales, hoteles, espacios públicos… Ahora con nuestra nueva marca estamos apuntando a los hogares, que tanta falta hace en estos momentos: naturalidad, luz, armonía y calidez.
Llegando a la calle Pedro Niño nos encontramos con toda sus ideas reflejadas en objetos, ¿cómo definirías tu espacio?
Es un hervidero de sueños, donde se dan cita no solo nuestro taller y proceso de diseño y estudio, sino todo tipo de eventos culturales. Actualmente hemos cerrado acuerdos con asociaciones culturales como ISA (Iniciativa Sevilla Abierta), movimiento en pro de la modernización ciudadana y el progreso social, y el Centro Italiano de Sevilla, que es un punto de encuentro para la difusión y promoción de la cultura italiana, y esperando cerrar nuevas propuestas en estos momentos en los que el apoyo es importante, especialmente en el sector cultural. Independientemente estamos acogiendo en nuestro espacio a otros artistas interesados.
¿De qué proyectos está más orgullosa?
El último ha tenido una repercusión brutal. Se llama “Entre encinas y estrellas”, está en Fregenal de la Sierra (Badajoz). Es un hotel astronómico. Me llaman para hacer hoteles de autor o que tengan un carácter. Me sale más trabajo fuera que dentro.
¿En Sevilla se valora todo este arte?
Aquí a todo el mundo le gusta mucho y me puedo quejarme de que no se valore. Pero, realmente, aquí no se compra. Todo lo que vendo de arte es para fuera. Restaurantes y viviendas sí, pero en diseño doméstico, nada de nada. He trabajado en Arabia Saudí, Francia, Nueva York, México, Estados Unidos, Italia,… Aquí cuesta trabajo consumir arte. Por eso te tienes que ir fuera. En Italia, si algo no tiene diseño no tiene valor. Aquí da igual.
¿Qué otros premios le han dado a parte de los mencionados anteriormente?
Me dieron el Proyecto Worth a través de Iniciativa Europea que une diseñadores, artesanos y artistas en búsqueda de nuevos productos, tendencias y proyectos, reconociendo la creatividad como un motor de impulso de la innovación. En 2019, Mercedes Eirín resulta ganadora con el proyecto iMorfé, un revestimiento vivo con luz y sonido para arquitectura de interior, mobiliario y arte, que fue presentado en Milán Design Week – Fuorisalone Digital 2020 y actualmente se expone en Dutch Design Week 2020. iMorfé surge de una síntesis del concepto darwiniano de adaptación al entorno, pero en esta ocasión, es el entorno el que se adapta al ser vivo. iMorfé propone el intercambio de posiciones frente a la sobreinformación e infoxicación actual, reforzando así la identidad individual y convirtiendo al espectador en protagonista, uniendo la artesanía del origami con la tecnología punta.
¿Cómo se has reciclado durante el confinamiento?
Pues cree el HT #artistasencasa. La iniciativa proponía trasladar la cultura de los artistas a las redes sociales durante el confinamiento, realizando vídeos grabados por sí mismos mostrando y explicando obras de su elección y autoría. Participaron más de 30 artistas consagrados y noveles de repercusión internacional y de diferentes disciplinas artísticas e incluso de diferentes lugares, como Alemania, Italia o Nueva York, tanto noveles como consagrados, representando disciplinas como escultura, arte plástico, arte visual, instalación artística, fotografía, diseño, moda, música y cine. Ha contado con el apoyo del Ayuntamiento de Sevilla, ha supuesto una nueva muestra de la solidaridad y compromiso de los artistas con la sociedad y la cultura y ha tenido repercusión en medios nacionales, contando con la participación de personalidades como el pintor Francisco Naranjo, los actores Eduardo Velasco, Ana Fernández y Mercedes Hoyos, el fotógrafo César Llerena; la diseñadora de moda Susana Álvarez y el arquitecto y diseñador Rafael Álvarez.
Recuerde aquellos premios Escaparate de 2018 donde aportó sus premios, ¿qué quería representar con ellos?
Como era el año de Murillo, cogí un árbol de los Jardines de Murillo y los lleve a un solo plano y dibuje la sobra de ese árbol, para después calarla. Las rosas bordadas son en alusión al cuadro de “La Visión de San Francisco de la Porcíncula” del pintor sevillano.
¿Cuáles son los iconos artísticos de toda la historia de Eirín?
De otra época, Dalí, Miguel Ángel, Francis Bacon y Toulouse-Lautrec. Actuales, Theo Jansen e Iris Van Herpen.
El color de su vida es….
El magenta, el principal color de mi marca. No pertenece a los colores primarios, es único y exclusivo, auténtico; como los productos y espacios que creamos.
Si tuviera que definir su trabajo sería…
Disruptivo, orgánico, visceral, irreverente, artesanal e innovación.
¿Quién puede decir que se ha enamorado de su trabajo?
Por ejemplo, el Museo ThyssenBornemisza o Basma Al-Sulaiman, una de las 50 coleccionistas más importantes del mundo. También Daniel Tormo. Es una suerte.
Texto: Javier Comas
Fotos: Aníbal González