MIURA
La ganadería que revolucionó el toreo.
El investigador Luis Rufino ha recopilado en un libro los 175 años de vida de la mítica ganadería Miura: sus logros, sus momentos claves, sus tragedias en los ruedos y los nombres que han hecho posible el mito del encaste de Zahariche.
Madrid. El sol comenzaba a caer en la tarde del 20 de abril de 1862. Eran los últimos años del reinado de Isabel II en España y el país vivía los preámbulos de un cambio político que llegaría con la Revolución Gloriosa del 68. La capital disfrutaba de una esperada corrida de toros en la que el arrojado torero cordobés José Dámaso Rodríguez “Pepete” demostraría porqué llenaba las plazas de entonces. Su turno llegó en el segundo de la tarde. Se llamaba Jocinero. Un toro berrendo en negro pero dominando el blanco del hierro de Antonio I Miura, que celebraba ese años sus dos décadas como ganadero. En mitad de los lances, Jocinero derribó al picador en la suerte de varas, lo que hizo que saltara el diestro para quitarlo del caballo. Sin embargo, el toro alcanzó a Pepete en el corazón tras ese quite. Éste se levantó tranquilamente y fue andando hacia la barrera, donde cayó muerto al momento. En ese instante, comenzó el mito de esta ganadería que ha formado parte fundamental del mundo taurino desde hace casi dos siglos. Esta sería la primera muerte de un toro de este hierro pero no la última. La fuerza y bravura de esta estirpe ha provocado la admiración y el miedo de muchos y ha engrandecido a otros nombres de toda la historia de esta celebración imprescindible para España; como imprescindible es este libro: “175 años de Miura a través del cartel y de la prensa”.
Escaparate se ha trasladado al domicilio del investigador y experto taurino Luis Rufino, autor de esta completa obra que recopila los más de 175 años de historia de la firma Miura. Una completa enciclopedia que abarca desde su creación en 1842 hasta el año del celebrado aniversario en 2017.
“No se ha hecho nunca nada igual en el mundo del toro”. Así describe Rufino este libro imprescindible que recopila la historia ganadera de Miura, desde sus inicios en el Cortijo del Cuarto en el actual barrio de Bellavista, hasta su llegada a la finca Zahariche de la Campana en los años cuarenta.
El mito de la supervivencia
Rufino comenta que “todos los hitos importantes de la ganadería” están recopilados en el libro. El inicio se sitúa en 1842, “cuando hacen la primera compra de ganado, por lo cual no existen aún carteles de festejos que aparecerán en 1845 por primera vez”. El investigador comenta que “el primero que incorporo al libro es la primera novillada en Sevilla el 15 de agosto de 1846, un cartel inédito”. El mismo “tiene una reseña muy curiosa y se dice que es la primera vez que se ponen las maromas alrededor del tendido del ruedo de la Maestranza para entorpecer que los toros saltasen al tendido”. Rufino señala “la pena de que los carteles actuales no ofrezcan esa información, sin dejar historia para el futuro”.
Avanzando en la historia de Miura, “en el siglo XIX, España era un polvorín y apareció la burguesía. En esos años, la riqueza se medía por las cabezas de ganado que se tenían ya que la tierra estaba en manos de la iglesia desde la Edad Media. El particular era arrendatario y no tenía acceso a la propiedad. Eso se elimina con las desamortizaciones, lo que provoca la creación de grandes ganaderías como la de Miura”. Un caldo de cultivo que provoca la creación de hierros ya desparecidos como Saltillo, Pérez de la Concha, Anastasio Martín o Murube. Ante esto, Rufino puntualiza que “apenas había ganaderos como hoy en día. Hacerse era una forma de ennoblecerse”.
La historia de Miura también pasa por los tiempos vividos, ya que “los gustos han cambiado”. Como detalle, Rufino comenta que, a diferencia de ahora, “había veces que los picadores estaban desde el principio hasta el fin de la lidia en el ruedo. Ha habido una evolución muy grande en las pullas, en las edades de las reses y en los sorteos sorteo”. Por ello, el valor de Miura es que “ha conocido todos estos procesos evolutivos. Ahí está la clave, en su supervivencia que abarca tres siglos distintos”.
Desde Antonio Miura, hijo de Juan, que llevó a sus grandes inicios a la ganadería, pasando por Eduardo que vivió el apogeo desde 1893 hasta 1917 y hasta llegar a la actualidad; “Miura era espectacular en todas las plazas”, señala el autor. Un libro que recoge desde la muerte de Pepete en 1862, hasta otras míticas de Miura como la del Espartero el 27 de mayo de 1894 o Manolete, el 28 de agosto de 1947; las grandes corridas celebradas benéficas por las catástrofes sufridas en España o las que se celebraban para conmemorar las fastuosas bodas reales. La evolución de la crónica periodística taurina, la cartelería o las propias corridas, la pasión por el toro que va impregnada en esa divisa reconocible desde la distancia en un ejemplar único e imprescindible.
El libro arranca con un prólogo del periodista Alberto García Reyes y se completa con textos de los ganaderos Antonio y Eduardo Miura y de José Luis García-Palacios, presidente de la Fundación Caja Rural del Sur que ha hecho posible su publicación. Patrocinado por la Caja Rural, donde puede adquirirse, sus beneficios están destinados a la Fundación Manolo Maestre Dávila.
Texto y Fotos: Javier Comas