Pues no paro, la vida no me da, peeero, no adelgazo, y eso que he dejado de tomar Coca cola Zero y cervecita, para los que me conocen saben que eso es todo un logro en plan ¡Te queremos, Ana! Y no lo entiendo, pero ya he aprendido que en la vida, no hay que empeñarse entender todo, así que lo llevo bien.
Y aquí ando, liando y reliando siempre cosas en la cabeza, cosas que quiero llevar a la práctica, y las llevo, y llego. A veces creo que moriré, pero qué va, aquí hay Ana para rato, así que me estoy planteando un verano de lo más diferente, y no, no es por el Covid, pero sí consecuencia de él, es lo que tiene.
Siempre he sido de hacer muchas cosas diferentes y si me gustan no me importa lo que sea. Si un verano estoy navegando en un barco por las aguas de Ibiza o Saint-Tropez, y al siguiente estoy en un mini apartamento con una amiga contando los euros que podremos gastarnos para cenar y copitas, pues más feliz que una perdiz.
No os contaré aún que haré, lo veréis, y prontito, porque os iré contando mis pasos en las redes, como si fuera una súper Influencer, y otra cosa no, pero seguro que nos divertiremos. Y no, no voy a trabajar en un circo, ni haciendo monólogos por los bares de la costa, aunque poco me falta, si me pongo a contar “to” lo q me pasa, estoy segura que aburrir no os vais a aburrir, y reíros, estoy segura que lo haréis. Pero claro, como todo en la vida, uno no hace “chas” y lo tiene todo organizado, noooo qué va, las ideas llegan a tu cabeza, muy lindas ellas, y te ves en ellas y todo fluye, como ha sido este caso, pero claro, no hay magia, hay que currárselo todo y así lo estoy haciendo, pero yo, como podéis imaginar, no dejó pasar una oportunidad de mezclar el trabajo con el ocio, y en consecuencia, el placer.
El placer de viajar a mi Zahara, hablar con unos y otros, de recorrérmela contando mi idea, mientras en La Sal te comes un buen tartar de atún, en Zoko, la mejor tortita de camarones del mundo, de postre el queso de la Jábega, y disfrutar luego de una de las puestas de sol más bonitas en Lo de Bibi mientras me tomo uno de sus deliciosos cócteles.
Y una vez hecho eso y darme el ok en mi cabeza, pues me dispongo a viajar a Madrid, a trabajar como si mañana no existiera, y me alquilo un coche, y como siempre voy a mil cosas a la vez, pues lo alquilo en la opción lleno/vacío, y lo que pensaba que me había salido por un chollo, deja de serlo, -empezamos bien-pienso, pero me lo compensan dándome un flamante Audi, mmm pienso,- ¿ves?, si es que todo va fluyendo-, y con 50 km, me dispongo a estrenarlo, escuchando a Luis Miguel a todo 7 I ESCAPARATE
volumen y cantando a todo lo que da, entonces me imagino que estoy en un anuncio, me faltan los pelos al viento…y por fin, visualizo Madrid, recibiéndome con los brazos muy abiertos y yo, muy receptiva, lo abrazo.
Abrazo que duró lo que la voz de GPS empezó a hablar, porque claro, tenía que estar para arriba y para abajo con el coche, y empecé a tener instintos asesinos hacía Mari Carmen, así la bauticé – Por favor, gire ligeramente a la derecha, para luego girar ligeramente de nuevo a la derecha y a continuación, ligeramente a la izquierda, ¿¿¿perdona??? ¿¿perdona??? ¡Que me voy pa Burgos bonita! Llegaba a los sitios con los pelos desbarataos del tó, y así dos días, con las de cosas que tenía yo que hablar por teléfono con unos y otros, y nada, dos días por Madrid, manteniendo un diálogo agresivo con esta señorita, que sí, que muy educada, pero que me quería volver loca, menos mal que a mí los disgustos me duran poco, en 10 vuelvo a ser de lo más encantadora.
Satisfacción máxima de hacer todo lo que tenía que hacer.
Al día siguiente lo mismo, esta mujer empeñada en quitarme mi buen talante y yo luchando contra la naturaleza para contenerme, además ese día no me lo fastidiaba ni Mari Carmen, porque por la noche, me esperaban risas de la mano de mi querido Carlos Latre, y fueron multiplicadas por mil, su espectáculo “One Man Show”, hace que durante hora y media, te olvides del mundo y solo rías y rías, no canta bien, canta mejor, y no sabía qué podía sacarme más risas de las que pensaba que tenía, y lo hizo, me reí tanto con Bisbal, Miguel Bosé, Fernando Simón, y las vicisitudes y aborígenes de la vida, que creía que moriría de la risa, literalmente.
En Madrid se bajó el telón, ahora se abre en Barcelona, y para los que podáis, también podréis disfrutarlo en el teatro Romano de Mérida con “Golfus de Roma”, un musical que promete sacarnos más risas todavía.
Cenar en “El Fogón de Trifón” es siempre una maravilla, disfrutar de sus platos y la compañía de él y su familia es un lujo. ¿Next meet? Zahara.
Dos días dormitando como una marmota me han hecho falta para empezar a ser persona. En el que escribo esto es el segundo, y llegará el tercero, donde estaré resucitada del todo y con muchas ganas de meterle mano a cada decisión que he tomado. Como siempre digo, nunca se sabe qué puede ocurrir mañana, pero sí sabemos que cada día debemos darnos lo mejor de nosotros mismos, no poner expectativas en lo que no dependa de nosotros, y solo echarle cuenta a lo que sabemos que es real, dejarnos de montarnos películas en la cabeza con efectos especiales, que para eso ya está Steven Spielberg, y disfrutad mucho, comed mejor y brindar con aquellos que cada día sacan lo mejor de ti.
¡¡¡Feliz verano!!!
@restaurantelasal, @zokozahara, @lodebibi, @carloslatre, @festivaldemerida @elfogondetrifon
Por Ana Nievas @ananievas_
@mordiscodemujer ? @savethecrown
Mamá de Mario y obsesa del buen gusto y la buena educación.
Diseño y creo cosas en mi cabeza desde que me levanto y escribir ocupa el rato en el que soy más yo, de todos mis ratos.
Founder & designer de Mordisco de mujer y Save the Crown.
Antes escribía en Yo Dona («Sur by Sur» 2013/2018), ahora en la revista Escaparate de Sevilla con «Save the Pepper».
Me casé tres veces, me separé otras tres, esperando encontrar ese amor que te hace cosquillitas en la barriga todo el rato.
Ahora, el romance es conmigo misma.
A mi, los hombres, en su justa medida, me inspiran, y por eso y como romántica empedernida que soy, pienso que encontraré a la persona que merezca mi respeto,mi admiración, mi pasión y mis ganas. Mientras, vivo.