El pasado 27 de septiembre, Sevilla vivió una velada muy especial. En el espacio ‘El Fuerte’ de Isla Mágica se celebró la XIV gala benéfica de la fundación ‘Tierra de hombres’, un evento que no solo congregó a 450 personas, sino que logró convertir la solidaridad en el hilo conductor de una noche memorable. Con un programa repleto de actuaciones musicales, encuentros sociales y una cena benéfica, esta gala se consolidó como uno de los eventos más significativos en apoyo a la infancia vulnerable, tanto a nivel local como internacional.
El paisajista encargado de reflejar el concepto creativo de esta entidad fue Fran Cisneros, quien construyó ‘Un bosque de Esperanza’: así como un árbol puede crecer solo, su fortaleza será mucho mayor al formar parte de un bosque. En ‘Tierra de hombres’, cada niño representa un pequeño arbusto con el potencial de convertirse en un gran árbol. Este crecimiento depende del ecosistema que lo rodea, cuando nos unimos formamos un gran bosque, lleno de diversidad que protege y nutre a los más vulnerables. Planta ese árbol que tienes frente a ti y recuerda que eres parte de este Bosque de Esperanza.
El evento reunió a destacadas personalidades de la cultura, la empresa, el sector sanitario y el ámbito institucional, quienes desfilaron por el photocall, mostrando su apoyo a la causa. Entre ellas, Agustín Bravo y Lucía Hoyos, encargados de conducir la gala, y artistas de renombre como Merche, Jorge González, Riki Rivera, Carlos Peralías y Paco Canalla, se unieron a la causa de la fundación ‘Tierra de hombres’, ofreciendo su talento para amenizar la velada. Las actuaciones en directo marcaron los momentos más emocionantes de la noche, combinando la música y el espectáculo con un propósito claro: recaudar fondos que permitan mejorar la vida de los niños más desfavorecidos del mundo.
Además, entre los asistentes destacaron reconocidos nombres como la modelo sevillana Jessica Bueno y el cantante y finalista de GH VIP, Luitingo, quienes no dudaron en sumarse a esta noche solidaria. También figuraron personalidades clave del mundo empresarial, como Enrique Ojeda, consejero de Bidafarma, y Juan Antonio López Olmos, presidente del Club Zaudín, junto a influyentes nombres del ámbito sanitario como Alfonso Carmona, presidente del Colegio de Médicos de Sevilla. Por su parte, diversas autoridades locales se hicieron presentes para apoyar el evento, entre ellas, Carmen Ortiz, delegada territorial de la Consejería de Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía, Dolores Romero, alcaldesa de Bormujos, y José Luis García, delegado de Derechos Sociales del Ayuntamiento de Sevilla.
La gala, cuyo objetivo principal fue recaudar fondos para los programas humanitarios de ‘Tierra de hombres’, estuvo marcada por un fuerte espíritu de colaboración. Grandes empresas y entidades como Reale Seguros, Bidafarma, Quirónsalud, el Ayuntamiento de Sevilla, y otras, se sumaron como patrocinadores, aportando recursos fundamentales para que la organización pueda continuar su labor. También apoyaron la causa instituciones como el Centro Porsche Sevilla, el Ayuntamiento de Tomares, López Real Inversiones 21, Dental Company, Bodegas Marqués de Cáceres, y marcas de renombre como Pantoja Grupo Logístico, Ron Abuelo y Coca-Cola. El evento contó además con la colaboración de influencers como odeotero, Araceli Vera, Rosa Iglesias y Alejandra Teruel, quienes ayudaron a visibilizar la causa entre sus seguidores.
Uno de los momentos más especiales de la gala fue el reconocimiento a la trayectoria de ‘Tierra de hombres’, una organización que desde su fundación en España en el año 1994, ha trabajado incansablemente para transformar las vidas de niños en situación de vulnerabilidad. La fundación forma parte de la Federación Internacional ‘Terre des hommes’, creada en Suiza en 1960, y está presente en más de 30 países. Su labor se enfoca en áreas como la salud infantil, la protección de los derechos de los menores, y la ayuda humanitaria en zonas afectadas por desastres naturales y conflictos armados.
Uno de los programas más emblemáticos de la fundación es ‘Viaje hacia la Vida’, una iniciativa que permite el traslado a España de niños gravemente enfermos, en su mayoría procedentes de África, para recibir tratamientos médicos especializados que no pueden obtener en sus países de origen. Gracias a este proyecto, más de 850 niños han sido tratados y curados en hospitales españoles desde la creación del programa. Durante la gala, se destacó cómo este proyecto salva vidas cada año, proporcionando una segunda oportunidad a niños que, sin este tipo de ayuda, no tendrían acceso a la atención médica.
Además de ‘Viaje hacia la Vida’, esta fundación trabaja en proyectos de salud materno-infantil, justicia juvenil restaurativa, y protección de menores en contextos de migración. De este modo, la organización responde de manera activa en situaciones de emergencia, ofreciendo ayuda humanitaria a familias afectadas por catástrofes, brindando refugios seguros, atención médica y apoyo psicosocial. En España, la entidad impulsa programas de educación para el desarrollo sostenible y la ciudadanía global, con el fin de concienciar a la sociedad sobre la importancia de proteger los derechos de los niños.
De este modo, la XIV Gala Benéfica ‘Tierra de hombres’ fue un éxito rotundo, no solo por la cantidad de fondos recaudados, sino por la capacidad de unir a diferentes sectores de la sociedad en torno a un mismo objetivo: cambiar vidas. A lo largo de la noche, quedó claro que la solidaridad puede movilizar recursos y energías, y que cuando las personas se unen, el impacto de sus acciones puede ser transformador.
El compromiso de esta fundación sigue siendo firme: garantizar que ningún niño quede atrás, especialmente aquellos que se enfrentan a situaciones de vulnerabilidad extrema. El apoyo recibido en esta gala permitirá que la entidad continúe desarrollando su trabajo en países de Asia, África, América Latina, Oriente Medio y Europa del Este, así como en España, donde sigue haciendo una diferencia tangible en la vida de miles de menores.
Es así como, a medida que la noche llegaba a su fin, con un animado fin de fiesta que cerró la jornada, quedaba una sensación de satisfacción colectiva. Los asistentes no solo disfrutaron de un evento lleno de arte y entretenimiento, sino que también tuvieron la oportunidad de formar parte de una causa que realmente importa. Al despedirse, muchos coincidieron en una misma idea: la solidaridad, cuando se convierte en acción, puede ser la clave para un futuro más justo y esperanzador para los niños más necesitados.
Texto: Carlota Acuña
Fotos: Gerardo Morillo